[Del ár. al-gara, incursión, ataque]. Con este nombre se designaban en la Edad Media las incursiones rápidas a caballo, realizadas por sorpresa, para saquear un territorio y tomar un botín o para arrasar una zona y desgastar así al enemigo. También recibían esta denominación los grupos de vanguardia que las llevaban a cabo. Era una táctica musulmana que fue adoptada por los cristianos quienes, con el nombre de cabalgada, la convirtieron en uno de los servicios que un vasallo estaba obligado a prestar a su señor. Los caballeros que integraban una algara se llamaban algareros o almogávares (v.) (del ár. al-mugawar, El que hace algaras). En la Corona de...