[Del lat. collatium]. En la Edad Media, labriego sujeto a cargas por habitar y disfrutar una tierra del senor. Designaba a los campesinos-colonos en León, Castilla, Aragón y Navarra, jurídicamente libres, pero que estaban sometidos a variadas formas de dependencia por cultivar predios de propiedad del señor, lo que implicaba pagar determinadas rentas y prestaciones. Por esta razón y por estar ligados a la tierra que trabajaban, fueron confundidos con los siervos. Su origen es controvertido: para algunos autores descendían de los labradores his-panogodos que, ligados a la tierra, disfrutaban de una tenencia a cambio de un tributo o censo, lo que les equiparó con los tributarios, juniores, foreros y villanos de censo o parata; para otros, el término hace referencia a aquellas personas que en el s. X pertenecían a grupos familiares extensos, entroncándolos etimológicamente con el...