Desplazamiento geográfico de individuos o grupos, generalmente por causas económicas o sociales, considerado desde el punto de vista del lugar de destino de las personas desplazadas. España ha sido, a lo largo de su historia, un país afectado de forma importante por los movimientos migratorios, tanto en el interior de sus fronteras, como en lo referente a salidas al exterior (v. emigración). El más reciente de los fenómenos que afectan a su población es el de la inmigración, que se inició a partir de la década de 1970 y que supuso una interrupción del tradicional saldo negativo de los movimientos migratorios internacionales; a partir de ese momento se produjo un aumento del retorno de emigrantes, al mismo tiempo que se iniciaba el proceso inmigratorio, prácticamente desconocido hasta entonces. España, que continúa siendo lugar de origen de emigrantes para los países europeos, se ha convertido, a su vez, en centro de atracción para una periferia más deprimida. En los...