Isidoro de Sevilla

Vida

Era hijo de Severiano, un cristiano que, según algunas fuentes, huyó de Cartagena a Sevilla, al ser tomada aquélla por los bizantinos en el 554; tras su muerte, los hermanos de Isidoro se ocuparon de su educación. Se sabe que el 13-III-599 sucedió a su hermano Leandro, del que era discípulo, como obispo de Sevilla, que asistió al sínodo de Toledo en 610 y que presidió el II Concilio de Sevilla (619) y el IV Concilio de Toledo (633). Murió en Sevilla el 4-IV-636 y en 1063 sus restos fueron trasladados de Sevilla a León para sepultarlos en el panteón real mandado construir por Fernando I de Castilla (1035-1065) y de León (1037-1065).

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