Certámenes literarios celebrados durante el s. XVI y el s. XVII para solemnizar acontecimientos de importancia relacionados con la familia real o con los grandes senores (matrimonios, nacimientos o sepelios) o bien en las grandes festividades religiosas (beatificación de santos, traslado de reliquias o efemérides religiosas diversas). Estos certámenes fueron auspiciados principalmente por las Universidades de Huesca y de Zaragoza, por las comunidades religiosas de conventos, cabildos o monasterios o bien por los nobles. Los concejos se encargaron de sufragar los festejos populares que con motivo de estos concursos se celebraron y rara vez fueron éstos los organizadores de los mismos. El fin de estos certámenes era el de estimular el ingenio de los poetas noveles, pero las composiciones premiadas fueron, la mayoría de las veces, de escaso valor literario. La falta de calidad de este concurso pudo deberse, quizás, a la obligación de ceñirse a un tema y a una forma métrica...