Denominación aplicada a la autorización legal dada a la policía y a la Guardia Civil para disparar contra los detenidos, en caso de intento de fuga durante su captura o traslado. Ya en vigor contra los independentistas cubanos durante el s. XIX, el gobernador civil de Barcelona, Severiano Martínez Anido, la retomó en 1920, con el apoyo del gobierno de Eduardo Dato, en su intento de acabar con el movimiento anarquista, a pesar de las protestas de republicanos y liberales. Su aplicación conllevó numerosos abusos contra los sindicalistas de la Confederación Nacional del Trabajo (CNT), especialmente en momentos de máxima tensión social, como en el trienio 1920-1923 en...