Martín Rebolledo

06/11/2008 400 Palabras

(Córdoba, 3-XI-1512-16-VI-1581). Eclesiástico. Hijo natural del III conde de Cabra, Diego Fernández de Córdoba, y de Antonia Hernández, fue reconocido a la muerte de su padre, por lo que tomó los apellidos de Córdoba y Mendoza. Ingresó muy joven en la Orden de Santo Domingo, y en 1536 ya ejercía como profesor de filosofía; posteriormente, entre 1539 y 1541, impartió clases de teología. Tras ser nombrado prior en Córdoba, ocupó ese mismo cargo en Santa Catalina la Real de Jaén (fue uno de los definidores del capítulo provincial celebrado en Santo Domingo el Real de Jerez en 1547), en Santa Cruz la Real de Granada y, desde septiembre de 1555, en Santo Domingo el Real de Jerez. Poco tiempo después fue elegido provincial de Andalucía (1556), y en 1558 se trasladó a Roma para asistir al capítulo general de su orden. De regreso a España, Felipe II (1556-1598) lo presentó para ocupar la sede episcopal de Tortosa (Tarragona), de la que fue obispo entre 1560 y 1574. En...

Este sitio web utiliza cookies, propias y de terceros con la finalidad de obtener información estadística en base a los datos de navegación. Si continúa navegando, se entiende que acepta su uso y en caso de no aceptar su instalación deberá visitar el apartado de información, donde le explicamos la forma de eliminarlas o rechazarlas.
Aceptar | Más información