Vinculación por la cual un hombre se ponía bajo la protección de otro. El patrocinio hizo su aparición durante el Bajo Imperio Romano, a causa de la crisis económica y la falta de seguridad imperantes en la época. Pese a la aparición de una fuerte burocracia estatal, la inquietud social crecía y, ya en el s. III, los pequeños propietarios buscaron la protección de latifundistas y altos mandos militares y civiles. La práctica del patrocinio se extendió hasta tal punto de que, a menudo, toda una aldea se acogía a esta forma de contrato de protección. La denominada “encomendación territorial”, por la cual los latifundistas protegían a los pequeños propietarios, principalmente, de los abusos de los curiales y de las cargas tributarias excesivas, era la fórmula más habitual. En este caso, las tierras eran entregadas al protector, sí bien sus legítimos propietarios podían seguir cultivándolas, siempre y cuando le pagasen un canon. La “encomendación personal”,...