Residuos radiactivos

Gestión de los residuos radiactivos

Las primeras centrales nucleares con fines civiles empezaron a funcionar en la década de los cincuenta, época en la que ya se apreciaron los riesgos de los desechos radiactivos y se propusieron planes para su gestión. Pese a ello, durante años algunos países arrojaron al mar grandes cantidades de residuos radiactivos. Este vertido fue prohibido en el año 1983, en la Convención de Londres, y ratificado en diciembre de 1992. A partir de aquella fecha, todos los países industrializados deben contemplar el almacenamiento de sus residuos radiactivos en emplazamientos terrestres. Por lo que se refiere al transporte de los residuos radiactivos, está regulado a nivel internacional por el Convenio de Basilea, aprobado en 1989 y que entró en vigor en 1992.

Este sitio web utiliza cookies, propias y de terceros con la finalidad de obtener información estadística en base a los datos de navegación. Si continúa navegando, se entiende que acepta su uso y en caso de no aceptar su instalación deberá visitar el apartado de información, donde le explicamos la forma de eliminarlas o rechazarlas.
Aceptar | Más información