Víctor Mira Marco

Sobrino del también pintor y cartelista Luis Marco, fue este último quien le proporcionó sus primeros cartones y pinceles, aunque su formación fue básicamente autodidacta. Vivió en Zaragoza con su familia a partir de 1966. Atraído por la pintura matérica de Antoni Tàpies y el lenguaje de Joan Brossa, después de una breve estancia en Barcelona (1966) se trasladó a Madrid (1968) —donde trabajó con una compañía teatral y en algunas producciones para Televisión Española (TVE)—, para viajar más tarde a Francia (Perpiñán) y, tras recalar de nuevo en la capital española, dirigirse en 1975 a Zúrich (Suiza), donde permaneció algunos meses. Luego de un nuevo paréntesis en España, se trasladó a Heidelberg y Múnich (Alemania), hasta que en 1977 alquiló una casa en Barcelona, viviendo desde entonces a caballo entre Alemania (la localidad bávara de Breitbrunn, donde se suicidó arrojándose al tren) y España.